(PRODUCTO AGOTADO TEMPORALMENTE)
La denominada “Gallina de Chulilla” o “De los Serranos” se caracteriza por el color negro de su plumaje, orejillas blancas, barbillas pequeñas, cara roja y patas de cinco dedos de coloración diversa (amarilla, pizarra y blanca). Es de aptitud ponedora, aunque no se trata de una población avícola de elevado impacto económico, su desaparición conllevaría la pérdida de este patrimonio, al igual que podría ocurrir en los próximos 10 años con el 25% de las razas avícolas mundiales, según informes de la Organización de las Naciones Unidas.
En diversos concursos de puesta durante las primeras décadas del siglo pasado, aparecen diversos lotes de gallinas de una razas citada como valenciana con diversa características fenotípicas en cuanto al plumaje, describiéndose colores puros y machadas desde el blanco hasta el negro. La denominación de la raza es tan amplia como su fenotipia, desde raza común del país, gallina del país, gallina valenciana, gallina de chulilla y recientemente se le ha denominado gallina de los serranos. La recuperación y estudio de la raza comienza con la localización en 2.002 de un núcleo en el pueblo de Chulilla (Comarca de los Serranos) que contaba con 35 gallinas, 9 gallos y 12 pollos por parte de la zooetnóloga Maria José Cárcel y los funcionarios de la Consellería de agricultura, Vicente García-Menacho y Bernat Peris.
Gallina localizada en cría tradicional en el municipio de Chulilla, perteneciente a la comarca de los Serranos de la provincia de Valencia. Existe un centro de recuperación en la masía de agricultura y ganadería ecológica denominada “el Teularet” situada en Navalón (Enguera) en la provincia de Valencia.
Silueta mediterránea de patas altas, similar a la castellana en tamaño. Se caracteriza por el color negro de su plumaje, orejillas blancas, barbillas pequeñas, cara roja y tarso de cuatro dedos de color pizarra. Cresta grande roja caída y sencilla. Pico rosa corneo.
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